dilluns, 3 de setembre del 2007

Rentrée PPP: Petardos, partidos, periódicos.

El País salía tan ufano ayer con una entrevista al presidente del Gobierno que ha hecho rechinar los dientes en las gradas. Ahí estaba el señor Rodríguez Zapatero, contento y sonriente, de vuelta de vacaciones, prometiéndoselas felices para los meses venideros. Entre tanto, como todo el mundo sabe, el país, España, marcha camino del desastre, del despeñadero, si no por los desmanes de hecho del Gobierno socialista, por los que tiene intención de perpetrar. De momento parece que no se negocia con ETA, Navarra no se entrega, España no se rompe. Bueno, pero se negociará, se entregará y se romperá; lo sabe muy bien el señor Mayor Oreja, que fue ministro del Interior.


Debe reconocerse a los etarras tesón, cabezonería, contumacia. ¿Que les detienen al mando artificiero? Pues ellos llaman por teléfono al DYA de Sanse y, en castellano o español (no debió de darles tiempo a encontrar uno que hablase euskera) anuncian una lluvia de bombas por las cunetas de la red viaria fronteriza al País Vasco, Euskadi, Euzkadi, Hegoalde, la CAV, Vasconia, Vascongadas como cada cual quiera llamar a los tres territorios con o sin Navarra/Nafarroa, etc. No está mal la idea. Toca en la fibra del famoso lema "sangre de mártires, semilla de cristianos", con algunos retoques, claro está.

Pero le falta fuste tecnológico. Eso de andar poniendo petardos en las carreteras de la Rioja más parece un acto de gamberrismo o de autovía borroka. Los otros anunciados no han estallado o ni siquiera existieron porque lo que los etarras querían era fastidiar el regreso a los veraneantes. ¿Conoce alguien algo más español que plantear las reivindicaciones justo cuando se puede fastidiar al prójimo en masa? Por eso las huelgas de controladores aéreos se hacen en ciertas fechas, igual que las de la RENFE, o las gasolineras o los agricultores invaden las calzadas en sus acciones cuando más trastorno pueden esperar. Visto lo visto, está claro que ETA no puede hacer ya ni lo que pueden conseguir los empleados de trenes de cercanías. Es posible que el final de esta dramática historia sea una comedia. Incluso una farsa. En efecto, mira que es español eso de amargar la fiesta al prójimo.


El retorno vacacional se prevé movido en el terreno de los partidos. La fulgurante rueda de prensa de la señora Díez en Bilbao ha sido el toque de clarín del nuevo partido que aún carece de nombre puesto que sólo consiste en una Plataforma para la constitución de un partido. Es un partido monotema, como los nacionalistas. De hecho es un partido nacionalista español, pero que toma aspectos distintos, según en dónde se establezca. Así, el caso de Ciutadans es propio de la situación en Cataluña mientras que estos de Plataforma pro proceden de otra experiencia social, la del País Vasco, que se ve bien en la foto que he sacado de los Blogueros de ¡Basta Ya!. Además de esas diferencias, nada baladíes, los dos entes son una mezcla de movimiento cívico y partido a la usanza clásica.

Lo que preocupa de éste en concreto es a quién restará votos, si a la derecha o a la izquierda. Y es difícil que el partido se defina en este eje precisamente porque es "nacionalista" y quiere estar con todos los españoles, sean de derecha o de izquierda. Eso puede mover a risa o levantar la adhesión de la gente. Es prematuro en tanto no comience a aparecer en las encuestas sobre intención de voto. Espero que el CIS lo incluya en su próximo barómetro. De todas formas quien aparece más preocupada es la derecha, mientras que la izquierda se lo toma más a la ligera, a pesar de que el nuevo partido ha empezado a definirse como nacionalista de izquierda. Perfecto. Es hora de contar. A ver si es verdad que existe ese género en España como existe en el País Vasco, Cataluña y Galicia. Nacionalista de izquierda.


Y como no sólo de partidos viven las rentrées, también se anuncia un nuevo periódico que se llamará Público que saldrá a primeros de octubre, valdrá 50 céntimos, será de izquierda y le quitará 100.000 lectores a El País según El Confidencial Digital, que parece dar la aventura por segura. La cuestión de si hay sitio para otro diario nacional y de izquierdas es como la de si hay sitio para otro partido nacional y nacionalista. Ya veremos.

Como asiduo lector de prensa digital ardo en deseos de saber qué pinta tendrá El Público y si lo dan en abierto o no. Y sobre todo estoy intrigado por saber qué tipo de izquierda va a representar el diario. Desde luego es una aventura y no de resultado cierto pues, como señala PRNoticias que también da cuenta de los líos dentro de Prisa, parece que el socio capitalista de la empresa, Jaume Raures, no goza del beneplácito de sus colegas en La Sexta para la aventura periodística. En fin, que buena suerte.