dimecres, 27 d’abril del 2016

El don de la oportunidad

Afirmo perentoriamente que no lo hemos hecho a propósito. Llevamos más de un año preparando este curso. Y los hados han querido que su impartición en la semana que viene coincida con la apertura de la campaña para las nuevas elecciones, esas que nadie quería al principio pero que, en el fondo, todos deseaban. Cuando uno no es capaz de realizar la tarea que se le ha encomendado por incompetencia propia, lo más cómodo es llamar al que formuló el encargo la primera vez, el cliente, en este caso el electorado y pedirle que lo formule por segunda. Como es natural, ninguno de los cuatro genios que han consumido otros tantos meses en reuniones inútiles, declaraciones y ruedas de prensa aun más inútiles, chanzas y provocaciones en los medios y las más imaginativas formas de perder el tiempo tiene ni la menor intención de echarse a un lado y dejar que otro/a intente lo que él no ha podido.

Y sería lo más lógico, lo que haría cualquiera que pudiese disponer de este personal: Fulano, Mengano, Zutano y Perengano no sirven. Lo han intentado durante cuatro meses y ha sido inútil. Cuatro meses tirados. Cambiémoslos por otras. Demos oportunidad a otras gentes menos resabiadas, menos encallecidas, más abiertas y con otros planteamientos.


Ni hablar. Estos son los jefes y aquí se quedan. ¿Quién tose en el PP a Rajoy, aun a sabiendas todos de que es un perfecto inútil? ¿Quién a Rivera, que ha sacado un partido de la nada y está dando de comer a muchos fieles? Eso en la derecha. En la izquierda es algo distinto. Hay mucha gente deseando perder de vista a estos dos niños bonitos, horros de inteligencia y livianos de personalidad pero con un narcisismo estratosférico. Pero tampoco aparece porque a quien ose postularse le montan unas "primarias" de esas de resultado ultrademocrático estilo búlgaro y todos tan contentos.

Y así va el país.

A lo mejor, si los candidatos se apuntaran al curso, conocerían medios, técnicas, procedimientos que les ayudarían a impedir que se produzca lo que todos temen más que a un nublado: que el resultado del 26J sea igual al de ahora.

El curso es en Valdepeñas. Pero, quienes quieran, pueden seguirlo en streaming o diferido. Basta con entrar en contacto con el Centro de la UNED de Valdepeñas.